Quería contaros lo bien que se lo pasa Leire en la playa. Han sido unos días de nuevas experiencias con la arena y el agua.
Cuando llegamos por la pasarela de la playa, ya se pone a mover manos y piernas con una sonrisa de oreja a oreja.
Después de jugar en la orilla, toca hidratarse bien bebiendo mucha agua.
Un ratito en la toalla va muy bien para observar todo lo que me rodea.
Y ahora, toca experimentar con la arena. A ver, a ver...
Parece que me gusta... probaré otra vez!
Que impresión!! Y ahora, cómo me la quito?
Bueno total... me lo estoy pasando genial, a jugar!!
Ale, ya estoy lista para darme un buen chapuzón.
Después del chapuzón, limpita y de nuevo en la toalla. Qué bien se está con papá!
Y así he terminado todos estos días. Y es que...la playa cansa mucho!!
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